Esta semana quiero recomendarte un libro lleno de melodías, de óperas, de jazz, de notas, de silencios. Se trata de Harmonía, de Mónica Rodríguez. Una historia que habla de música, pero también de vivir.
El señor Trentino
Una noche, cuando el afinador de pianos Leonardo Populus regresa de afinar el piano de Alea Divani, algo ocurre que cambia su vida para siempre. Sin saber cómo, sus pies lo guían hasta un descampado en el que hay un viejo piano entre la basura. El instrumento no parece muy valioso, sin embargo, Leonardo enseguida advierte que esconde más de lo que su aspecto sugiere a primera vista. En ese descampado, también aparece una niña pequeña de ojos azules, Elizabeth. Atraída por el piano, igual que Leonardo, no duda en acercarse y tocar una melodía. Esas notas que interpreta Elizabeth dan lugar a varios sucesos extraordinarios: el corazón del instrumento comienza a latir con fuerza, la vieja mansión abandonada que hay frente a ellos cobra vida, y el corazón de afinador de Leonardo queda para siempre unido a esa niña y a ese piano, al que bautiza como señor Trentino.
La casa de Euterpe
Lo que no podía saber Leonardo es que Elizabeth, con su música, tiene la llave a un lugar mágico, al país de la música, a Harmonía. Entusiasmado con las emociones que lo atraviesan al escuchar a aquella niña tocar el piano, llama a sus amigos, Vito Peterson, un viejo pianista de jazz, y Modesta Morgana, cantante de ópera y mujer de fuerza extraordinaria, para que le ayuden a llevar el viejo y olvidado piano a la humilde casa de la niña. Allí conocerá a la tata Dolinda, la mujer que cuida de Elizabeht y su hermano; a Chico, el hermano de Elizabeth, y a Cecilio Puch, el avaro y distante tutor de los niños.
Vivir
El virtuosismo de Elizabeth proporciona buenos momentos y muchas alegrías al grupo de amigos, pero pronto ese gozo se transformará en obligación y una responsabilidad excesiva. El corazón de la niña se irá apagando, con el mismo dolor que sufre el señor Trentino, abandonado en un rincón.
Harmonía
Y es que para entrar en Harmonía, hay que querer hacerlo. Y para querer, hay que darse cuenta de que uno quiere. Harmonía es un libro que habla de música, de corazón y de vida. Que habla de amistad y de pasiones; de olvidos, de recuerdos. De las cosas que nos mueven. Una historia con tintes fantásticos atravesada de notas y silencios. Un libro escrito con la delicadeza de Mónica Rodríguez, que te atraviesa el corazón, pero que también te arranca sonrisas, incluso carcajadas.
Si te gusta escribir…
Cuando creamos personajes, es interesante dotarles de alguna cualidad única y extraordinaria. Eso hará que los lectores los fijen mejor en su memoria y puedan identificarlos por esa cualidad. Fíjate en Modesta Morgana, una cantante de ópera forzuda, capaz de cargar con un piano ella sola. Una mujer de voz prodigiosa que, sin embargo, no es capaz de cantar cuando la gente le presta atención. O en Vito Peterson, un viejo pianista retirado que pasa los días encerrado en su casa, sin más motivación que tomarse un whisky, hasta que Elizabeth y el señor Trentino le ofrecen las motivaciones suficientes para abandonar su vida anodina y de enclaustramiento. Un señor mayor que pasa de cero a cien en un segundo.
Si me sigues de hace tiempo, sabrás que Mónica Rodríguez es una de mis autoras preferidas. Te dejo por aquí las reseñas de Un gorrión en mis manos, Esta, la vida, Alma y la isla, La mujer del retrato, Cueto Negro y Escritos en la guerra por si quieres saber más de algunas de sus historias.
Abrazos en si bemol